La pérdida auditiva puede aparecer desde el nacimiento, por causas congénitas, genéticas o mal formaciones, puede aparecer después de una cirugía, a lo largo de la vida sin ninguna explicación, por sufrir de alguna enfermedad, por el consumo de medicamentos ototóxicos, por un accidente, por exposición a ruido o por razones desconocidas en cualquier etapa de la vida. Lo ideal es, una vez hecho el diagnóstico, realizar la adaptación de una ayuda auditiva e iniciar la amplificación del sonido.
Esta ayuda auditiva esta indicada para el manejo de la pérdida auditiva de tipo conductivo o mixto en niños muy pequeños o adultos que no se quieran operar o que por su condición de salud no se pueden someter a cirugía.
Esta solución auditiva se compone de dos partes: la cinta elástica y el procesador de sonido Ponto. La cinta elástica permite sujetar el procesador de sonido Ponto en la cabeza, en una posición óptima para su comodidad y audición.
El procesador de sonido Ponto capta el sonido y lo convierte en vibraciones. Estas vibraciones viajan a través del conector de la cinta elástica hasta el hueso y hasta el oído interno.
Para los niños con pérdida auditiva, la detección y el tratamiento oportuno puede significar la diferencia entre escuchar el sonido y aprender el lenguaje, o dejar que la pérdida auditiva se interponga en el camino del desarrollo.
Con Ponto Banda Suave y el procesador de sonidos Ponto, los niños obtienen acceso oportuno al habla y los sonidos para que puedan explorar e interactuar con el mundo que los rodea. Esto les da una gran base para el desarrollo del habla.
Ponto Banda Suave ofrece a niños y adultos la oportunidad de probar y experimentar el sistema Ponto, sin necesidad de cirugía.