¿Alguna vez has notado que tu voz suena más grave y resonante cuando te escuchas a ti mismo que cuando la oyes en una grabación? Esto no es un defecto de la grabadora; es la prueba de que tu cuerpo utiliza dos caminos distintos para procesar el audio y que existen diferentes sistemas de conducción del sonido actuando simultáneamente.
Comprender que la audición no es una vía única es fundamental para cuidar tu salud. Hoy explicaremos cómo funcionan estos sistemas de conducción del sonido, tanto la vía aérea como la ósea, y cómo Medihumana integra este conocimiento para ofrecer soluciones que devuelven la capacidad de escuchar.
¿Qué son los sistemas de conducción auditiva? (Más allá de un hobby)
Es probable que hayas visto en el mercado auriculares deportivos de «conducción ósea». Sin embargo, es vital hacer una distinción clara: los sistemas de conducción del sonido de grado médico no son simples accesorios de entretenimiento.
Mientras que los auriculares comerciales buscan comodidad, un sistema médico de conducción auditiva es un dispositivo médico prescrito para la hipoacusia. Su objetivo no es poner música de fondo, sino restaurar la audición funcional en pacientes donde los sistemas de conducción del sonido naturales están bloqueados.
Estos dispositivos médicos captan el entorno sonoro y lo transforman en vibraciones precisas que viajan a través del hueso del cráneo, llegando directamente al oído interno.
El papel de los sistemas de conducción del sonido en la audición
Para saber qué solución necesitas, primero debes visualizar cómo llega el sonido a tu cerebro a través de los dos sistemas de conducción del sonido principales:
- Vía Aérea (La ruta tradicional): Es la forma estándar. Las ondas viajan por el aire, mueven el tímpano y los huesecillos. Aquí actúan los audífonos convencionales.
- Vía Ósea (La ruta alternativa): El sonido viaja mediante vibraciones a través de los huesos de la cabeza. Los sistemas de conducción del sonido por vía ósea estimulan la cóclea directamente sin pasar por el conducto auditivo.
Diferenciando problemas: ¿Cuándo falla el sistema?

Saber cómo cuidar el oído implica reconocer qué parte de los sistemas de conducción auditiva está fallando:
- Hipoacusia de Conducción: Ocurre cuando hay un bloqueo físico (infecciones, malformaciones). El nervio está sano, pero la vía aérea no funciona. En estos casos, los sistemas de conducción del sonido por vía ósea son la solución ideal, ya que evitan la zona dañada.
- Hipoacusia Neurosensorial: Ocurre cuando hay daños en el oído interno. Aquí el camino está libre, pero el receptor falla. Generalmente, se trata con audífonos de vía aérea.
¿Cómo saber si un sistema de conducción del sonido es para mí?
Si te han dicho que no puedes usar audífonos tradicionales, un sistema de conducción del sonido óseo podría ser tu respuesta. Es frecuentemente indicado para:
- Malformaciones: Personas con microtia o atresia.
- Otitis crónica: Pacientes que no pueden obstruir su oído con moldes.
- Sordera Unilateral (SSD): Es aquel caso donde existe pérdida auditiva en un solo oído. El sistema de conducción auditiva envía el sonido del lado sordo al oído sano.
¿Es una opción segura para niños?

Sí. La audición es la base del lenguaje. Existen sistemas de conducción del sonido no quirúrgicos (como bandas suaves) diseñados para bebés, permitiéndoles acceder al sonido sin cirugía.
Medihumana: Tu aliado en tecnología auditiva
Recuperar la audición trata de elegir la ruta correcta. Ya sea que requieras una solución aérea o uno de los sistemas de conducción del sonido osteointegrados, necesitas respaldo médico.
En Medihumana, te ayudamos a encontrar la opción que se adapte a tu anatomía. Consulta nuestro directorio de aliados para determinar cuál es el mejor sistema de conducción del sonido para ti.